FANTASÍA I

Amo me descolocó anoche... en plena tanda de bofetadas y mientras le chupaba los pezones...

- Te gusta jugar a violencia doméstica?

- Si, mi Amo. Mucho.

- Qué quieres que te haga?

- ...


Me dejó completamente flasheada.. Y yo que sé! o sí, si sé qué quiero... pero en aquel momento lo último que me apetecía era pensar... me salió un... "No se..."

Así que Amo decidió improvisar... fue muy violento... y yo me puse perra como nunca... gracias, gracias... gracias, Amo.

El caso es que esta mañana mientras perreaba mis quince minutos extras en la cama... y con el cepillo de dientes a puntito de encenderlo para masturbarme estuve pensando una fantasía. Qué me gustaría que mi Amo me hiciese...

Salieron varias ideas, las voy a ir plasmando poco a poco en este apartado. Así voy dando ideas a Amo y de paso me pongo a cien.. jajajaja!!



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FANTASÍA I


La perra tiene una nueva instrucción. Cuando la requiera el Amo deberá llevar consigo una herramienta de dolor y el objeto que esa noche va a llevar metido en el culo.

- Repasa bien todo lo que debes tener preparado para presentarte ante mí.

* Si, Amo.

- No quiero ningún fallo. Si observo algo que no me satisface te castigaré. Sabes cual es el castigo, verdad?

* Si, Amo. Un solo golpe superior a mi nivel 10.

- Bien, buena chica.

La perra repasa mentalmente todo lo que debe llevar. Uñas, lencería, plug, vara, cena, cervezas, collar... se prepara mientras espera la orden de Amo.

- Sube, puta.

Cuando llega frente a su Amo, éste la besa apasionadamente... la mira a los ojos con todo el amor que es capaz de transmitir, sonríe y le da un beso en la frente. Ella ya está mojada...

- Desnúdate, quiero inspeccionarte. Qué trajiste para castigarte?

- La vara, Señor.

- Esperemos no usarla...

- Esperemos, Señor.

Ella se desnuda y se pone en posición, brazos y manos extendidos, piernas abiertas, mirada al frente.

El Amo se acerca a ella y la observa, comprueba la pintura de las uñas, el tanga, la depilación...
Observa los moratones en el culo... los toca y los revisa con atención. Le gusta el panorama... ella lo sabe y sonríe con malicia. Le llegan recuerdos del día anterior.

- Te echas crema?

- No, Señor... me gusta llevar tus marcas el mayor tiempo posible.

- Cuídatelas o no volverás a tener. Te lo aseguro.

- Si, señor, me las cuidaré.

Amo apoya ligeramente su mano en la espalda de la perra. Ella sabe lo que tiene que hacer. Se inclina y apoya las manos en el suelo. El Amo se agacha hasta que tiene el ojo del culo de su perra a la altura de su cara. Abre bien sus cachas y escupe en el pequeño orificio. Mete un dedo. Luego dos... tres. Los gira y mueve dentro de ella... con fuerza, con frialdad. Como un mero trámite de inspección... los saca y observa complacido que salen limpios y huelen a menta... el vics es una maravilla como instrucción. Se levanta y de pronto se da cuenta.

El Amo observa los pies de la perra. Ella da un respingo. Nooo....!!!

- No te pintaste las uñas de los pies. Por qué?

- Lo olvidé, señor. (Mieeeeerda). Pellizco al estómago.

- Tráeme la vara y apoya las manos en la pared.

La perra obedece y se prepara para recibir el castigo.

- Elige, culo o muslos

- Culo, Señor

- Bien. Preparada?

- Si, Amo.

Amo descarga con fuerza un varazo en las dos nalgas que la hace soltar un gruñido y agacharse de dolor.

- Qué tienes que decir?

- Gracias, Señor.

- Bien. Sigamos con la inspección.

La perra vuelve a colocarse en la posición mientras el Amo sigue con el trabajo de control. Se acerca a su oido y le dice serio y contundente:

- Esta tarde perdiste las llaves de nuevo. Eres una perra muy despistada. La próxima vez que lo hagas será motivo de castigo. Entendiste?

- Si, mi Amo.

- Bien, buena chica, - Sonríe complacido y la besa en la mejilla, vuelve ha hacerle el gesto para que se incline y apoye las manos en el suelo-. Trajiste tu juguete?

Ella le señala el chupete de pinchos de goma y obediente se agacha. Él le mete el plug primero en la boca, que lo llene bien de saliva. Luego en su culo. Ella se retuerce de dolor. Es muy grande y los pinchitos de goma arañan suavemente cada pliegue de su esfinter. Una vez colocado y sin cambiar la posición le da una buena tanda de azotes de propina...

Vístete y tráeme la cena. Tengo hambre.

La perra obedece y va sirviéndole la cena, la cerveza, el tabaco y hoy por petición de Amo, un limón. Cuando ha comprobado que tiene a su Amo bien atendido vuelve a desnudarse y se sienta a sus pies, en el suelo. Le entrega el extremo de la correa que lleva atada al collar, Amo decide donde atarla, aunque hoy ha preferido llevarla en la mano y mantenerla tensa, de vez en cuando la permite cambiar de postura. Pero siempre tensando la correa. La mira pensativo...

- Mañana quiero que me traigas una bolsa de plástico transparente. La llevarás puesta en la cabeza mientras veo la película. También tráete cinta adhesiva y el cable.

El Amo cena tranquilamente mientras disfrutan de la película. De vez en cuando le da un trozo a su perra. no debe comer demasiado o vomitará cuando le meta la polla hasta la garganta.. y Amo no quiere eso... cuando cree que ha comido suficiente coge el limón.

- Abre la boca

La perra obedece, deja que su dueño le coloque el limón bien entre los dientes. Así se quedará hasta nueva orden.

Una vez Amo ha quedado satisfecho de la cena se recuesta en la silla. Le da los platos sucios a su perra quien debe lamerlos hasta dejarlos limpios. (Para esta actividad le permite quitarse el limón, aunque se lo pondrá de nuevo) Cuando ha terminado la tarea los coloca en la parte de atrás para fregarlos después.

Una vez terminada la película Amo juega con su perra... hoy ya que tenemos la vara... espalda, culo, manos... tripa... hasta en la lengua. Llevarla al límite tres o cuatro veces. Que suplique parar...  mañana ya veremos... La bolsa de plástico puede dar mucho juego.

Una buena mamada de premio... bien violenta, como le gusta a ella... y tras ayudarlo a componerse el uniforme, besar la hebilla del cinturón y lamerle bien los zapatos, él la despide con un beso en la frente y una sonrisa de satisfacción por el trabajo bien hecho.

Ella se viste, satisfecha. Mira orgullosa a su Amo...

- Te quiero mucho. Gracias.

- Más te vale. Márchate. Directo y sin entretenerse.

- Jajaja! Vale.